Alergia vs Intolerancia

La intolerancia a la lactosa es el resultado de una capacidad reducida para digerir y absorber la lactosa (el azúcar presente en la leche) debido a la falta de la enzima lactasa. Es muy rara en niños menores de 5 años, incluso en aquellos con Alergia a la Proteína de Leche de Vaca (APLV). La leche materna contiene naturalmente una gran cantidad de lactosa, que ofrece beneficios para el crecimiento y desarrollo del lactante sano.

APLV - 3% de los lactantes de menos de 1 año

Intolerancia a la lactosa - Muy rara en niños de menos de 5 años
El 65% de las personas a nivel mundial tienen intolerancia a la lactosa en la edad adulta.

Es común confundir la APLV con la Intolerancia a la Lactosa, por ello es importante conocer la diferencia entre la intolerancia a la lactosa y la APLV ya que ambas tienen distintas causas y también tratamientos; además, la APLV normalmente se desarrolla en edades muy tempranas, mientras que la intolerancia a la lactosa es extremadamente rara antes de los 5 años.

¿Qué es la APLV?

La APLV es un tipo de alergia a la leche en la que el sistema inmunológico del lactante responde a las proteínas que se encuentran en la leche de vaca, lo que ocasiona que presente síntomas alérgicos. Estos pueden incluir problemas en la piel (erupciones, urticaria, piel reseca, escamosa o con comezón), aparato digestivo (diarrea, vómitos, estreñimiento y reflujo) y aparato respiratorio (respiración ruidosa, tos, secreción nasal). La APLV, por lo general, ocurre antes que el lactante cumpla su primer año.

¿Qué es la intolerancia a la lactosa?

En contraste con la APLV, la intolerancia a la lactosa no involucra al sistema inmunológico. En cambio, es la incapacidad de digerir el azúcar lactosa que se encuentra en la leche de vaca y es muy rara en niños menores de 5 años. La lactosa es uno de los carbohidratos (azúcares) más importantes en la leche materna y proporciona muchos beneficios a los lactantes. La lactosa ayuda a promover una flora intestinal sana y la absorción de calcio.